6 consejos para aprender a montar a caballo
Conviene iniciarse en esta práctica desde bien joven, sin miedo, con firmeza y respetando al animal
La equitación, aparte de ser una afición que atrae a un amplio sector del público, resulta una práctica que tiene varios efectos beneficiosos para la salud. () ¿A que no lo sabías?. Aprender a montar a caballo ayuda a mantener la forma física mientras se disfruta de la naturaleza. Presta atención porque vamos a darte varios consejos para aprender montar a caballo.
Los expertos recomiendan iniciarse en esta práctica desde bien joven. A partir de los cinco años de edad, el niño ya puede tener sus primeros contactos con el caballo. Como suele ocurrir en otras actividades deportivas, es aconsejable que el pequeño comience a montar a caballo cuanto antes. A esa edad están en completa disposición para aprender.
Una vez ya se tienen las primeras nociones de equitación, conviene abrir bien los ojos con el fin de absorber seis consejos para aprender a montar a caballo:
1) Primero de todo: Conviene armarse de paciencia para ir comprendiendo todo lo que vamos adquiriendo progresivamente. Hay que rodearse de buenos profesores que nos explique bien los pormenores de esta disciplina. Sin prisa, pero sin pausa.
2) No debemos someter al animal mediante una agresión si no responde a nuestras órdenes. Sí que hay que mostrarse firme y enérgico, pero no violento. Hay que entender la psicología del caballo.
3) Aparcar el miedo. Si te subes con temor a un caballo, el animal lo notará. Has de tenerle respeto, pero no miedo. Las inseguridades a la hora de montar en un equino pueden pasarnos factura en forma de caídas o estado de pánico.
Prevenir accidentes
4) La seguridad es fundamental. Para prevenir accidentes o cualquier otro tipo de susto, conviene ponerse un casco para montar a caballo. Tampoco está de más dotarnos de un protector de espalda que nos proteja esta parte del cuerpo en caso de caída.
5) Para aprender a montar a caballo, hay que ir probando con diferentes equinos. Cada animal, aunque sea de la misma especie, es diferente. Y de todos ellos aprendemos algo nuevo cada día que pasa.
6) En caso de caída, hay que afrontarla con decisión. Una caída no supone un fracaso, sino que es un simple accidente. Tarde o temprano llegará el momento que, por cualquier circunstancia, el jinete no podrá controlar la situación y dará con su cuerpo en el suelo. No pasa nada. Cuando te caigas, incorpórate de manera inmediata. De los errores también se aprende.
Los beneficios en nuestra salud que nos proporciona montar a caballo son unos cuántos:
-Ejercitamos diversos músculos del cuerpo que por norma no solemos hacer.
-Proporciona elasticidad y equilibrio.
-Mejora nuestra postura.
-Favorece la coordinación motriz.
-Nos libera del estrés.
La práctica de montar a caballo no solo tiene propiedades beneficiosas a nivel físico.
A nivel psicológico, cabe destacar el estrecho vínculo emocional que mantenemos con el equino. Y el hecho de tener que entrenarnos con él supone un ejercicio de responsabilidad, constancia y mucha paciencia. Trabajar con el caballo a diario nos permite ganarnos su confianza y resulta una tarea idónea para los más pequeños. Los niños, el hecho de montar a caballo les otorga responsabilidad y respeto por los animales.
Estrechar lazos con el equino supone también cuidar de su alimentación. Las redes, sacos y paños de Portoverde permiten al caballo comer de una manera práctica y sencilla. Gracias a estos accesorios de gran capacidad y resistencia, el animal puede dosificar su alimento y evitar úlceras.
