Cómo proteger a tu caballo del frío

Le puedes colocar mantas, darle más alimento y bebida, buscarle un buen cobertizo y que haga ejercicio

Como mamífero y animal de sangre caliente que es, el caballo no es ajeno a las bajas temperaturas que estamos padeciendo este invierno. Por lo que resulta esencial que su cuidador le proteja bien del frío y el equino se sienta a gusto. Sin caer tampoco en un exceso de protección. No obstante, el caballo es un animal inteligente que a lo largo de la historia siempre ha sabido adaptarse a las diferentes climatologías que ha habido en el planeta.

Desde Portoverde, la red de tu caballo, te recomendamos algunos sencillos consejos que pueden serte muy útiles para proteger a tu amigo del frío. Una rutina sencilla para que se sienta en las mejores condiciones posible.

Nuestros consejos

-Comprobar su nivel de confort. Deben disponer de un cobertizo para que se pueda proteger de la lluvia y el viento. El animal tenderá a buscar la posición corporal más adecuada para resguardarse de las bajas temperaturas. Si el caballo tiembla, hay que resguardarlo cuento antes.

-Usar mantas. De esta manera lograremos que el equino mantenga su peso y su forma física. En invierno el caballo produce menos pelo corporal con el que poder abrigarse. Por lo que se requiere el uso de ayuda externa en forma de manta para calentar su cuerpo. En caballos que se montan con frecuencia o que son esquilados, la manta se presenta como una herramienta muy útil. Debemos prestar atención en su colocación, que no le provoque rozaduras en la piel.

-Evitar los cambios bruscos de temperatura y las corrientes de aire.

-Solo ducharemos al caballo si es estrictamente necesario. Se hará con agua caliente y, a continuación, le secaremos rápidamente con una manta que elimine toda humedad.

-En cuanto al agua que bebe a diario para hidratarse, estaremos atentos para evitar que se congele. Si el caballo ingiere menos líquido por esta causa puede padecer un cólico por impactación. Colocar una piedra de sal en su bebedero favorece el consumo de agua.

-También su dieta es esencial. Una alimentación basada en una buena cantidad de forraje nutritivo le ayudará a mantener su peso ideal. Tanto o más que su comida, es importante la manera en que el caballo se alimenta. Lo más recomendable es el Slow Feeding, una nueva forma de dar de comer al animal consistente en que lo realice lentamente durante largos periodos de tiempo. Gracias a las redes Portoverde se simula la forma natural de comer que tienen los caballos en libertad.

-El animal debe moverse continuamente y hacer ejercicio. De esta manera se mantiene activo. De lo contrario, el frío agarrota sus extremidades y le puede originar problemas musculares.

 Recuerda

Esta serie de útiles consejos ayudarán al bienestar de tu caballo, que es de lo que se trata. ¿Podemos comprobar si el equino mantiene una temperatura correcta en invierno? Si no disponemos de termómetro, una opción alternativa es palpar la base de las orejas o bien el vientre justo detrás del codo. Son dos zonas que deben estar templadas, independientemente de si hace frío o calor.

Con los sacos y redes para heno de Portoverde a tu caballo se le garantiza una alimentación en la que prima la calidad sobre la cantidad. El establo permanece limpio por más tiempo y se evita que el heno se pudra en el suelo. Se ahorra tiempo y dinero. La salud de tu caballo lo agradecerá.